Cuerpo-territorio: La mirada de Lorena Cabnal a la lucha feminista indígena

 8 de marzo de 2025

 

Escrito por: Melissa Morales Barahona*

 

En el debate sobre justicia y resistencia en los pueblos indígenas, la aproximación epistémica de Lorena Cabnal introduce una perspectiva que desafía tanto el colonialismo externo como las estructuras patriarcales internas. Su concepto de “cuerpo-territorio” es central en esta reflexión, ya que, vincula la soberanía del cuerpo con la lucha por la autonomía política y territorial.

En este sentido, para Cabnal, los cuerpos femeninos son espacios de disputa (territorios), que deben ser defendidos frente a múltiples formas de violencia [1].

 

Adicionalmente, Cabnal desafía la idea de que las comunidades indígenas son espacios completamente justos, pues en ellas también operan formas de control sobre los cuerpos femeninos denominándolo “patriarcado ancestral originario”. En su propuesta, el cuerpo no es solo un ente biológico, sino un territorio en sí mismo que sufre opresiones tanto desde el colonialismo, como desde el patriarcado. Es así, que la defensa del territorio no puede desvincularse de la defensa del propio cuerpo frente a las agresiones patriarcales. Y, esto implica no solo una lucha contra las formas más visibles de violencia, como la física o la sexual, sino también contra las formas estructurales y simbólicas que perpetúan la desigualdad [1].

 

Bajo este contexto, Cabnal plantea que la lucha por la autonomía corporal no puede separarse de la lucha por la tierra, pues ambas son territorios en disputa dentro de sistemas de dominación. La defensa de la tierra es parte fundamental de su apuesta política, lo que la lleva a cuestionar a otros feminismos que, aunque reconocen que lo personal es político y defienden la autodeterminación de los cuerpos, no siempre consideran la relación con la tierra como un eje central de su lucha. Para Cabnal, este vínculo es imprescindible, ya que un cuerpo que busca autonomía también necesita condiciones materiales para sostenerse: agua, aire y alimentos [2].

 

Desde esta perspectiva, el feminismo requiere integrar la relación con la tierra y asumir que “lo comunal es político”.

La dimensión comunitaria no es solo un espacio de resistencia, sino también de interconexión con el territorio.

Así, su activismo se basa en la idea de que el cuerpo y la tierra están entrelazados, y que la lucha por los derechos de las mujeres está directamente vinculada con la protección del territorio [2].

 

Por tanto, la apuesta de Cabnal nos invita a romper con la romantización de las comunidades indígenas como espacios de armonía absoluta y permite abrir paso a una lucha más integral y transformadora. Su concepto de “entronque patriarcal”, explica cómo el patriarcado presente en las comunidades indígenas se articula con el patriarcado introducido por la colonización, creando un sistema de dominación que profundiza la subordinación de las mujeres. Este entramado de opresiones requiere una lucha feminista que integre la defensa de los derechos indígenas con la transformación de las relaciones de género dentro de las propias comunidades [3].

 

Finalmente, el llamado a la justicia de Cabnal es contundente:

la lucha por la liberación de los pueblos originarios no puede estar completa sin la erradicación del patriarcado que también los atraviesa, y sin la reivindicación del cuerpo como el primer territorio a defender.

En este 8M, su pensamiento cobra aún más fuerza, recordándonos que la lucha feminista debe reconocer las múltiples opresiones que atraviesan los cuerpos femeninos y que la verdadera transformación social requiere un compromiso con la justicia en todas sus dimensiones.

 

 

Referencias

  • Imagen 1 PBI: https://pbicanada.org/2020/02/12/pbi-guatemala-shares-articles-about-lorena-cabnal-on-territorial-defence-ancestral-memory-and-healing/

 

  • Imagen 2 tomada de Pinterest, autora: Coeur Nomade

 

[1] Cabnal, L. (2019). El relato de las violencias desde mi territorio cuerpo-tierra. En X. L. Solano, & R. Icaza, En tiempos de muerte: Cuerpos, Rebeldías, Resistencias (págs. 112-123). San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México: © Cooperativa Editorial Retos.

 

[2] Cabnal, L. (25 de Enero de 2023). Lorena Cabnal, sanadora maya: «La sanación es un proceso personal que se hace comunal». (M. Á. Fernández, Entrevistador)

 

[3] La tinta. (2020). Las sanadoras de la Red trabajan para sanar los efectos de la opresión y el riesgo político que enfrentan las mujeres indígenas defensoras del territorio. Su propuesta, denominada sanación como camino cósmico político, busca abordar los dolores y enfermedad. https://www.youtube.com/watch?v=gOkbzksSakQ&ab_channel=Latinta.

 

 

*Integrante del Semillero sobre Indigenización, género y feminismos de la Fundación Grothendieck.  Economista, Magíster en Género y estudiante de las Maestría en Estudios Interdisciplinarios sobre Desarrollo en la Universidad de Los Andes.

 

 

Los textos que aquí se publican son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no necesariamente expresan la filosofía ni la posición de la Fundación Grothendieck.

 

 

 

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